Un Sueño que se Cumple, Una Obra para Seguir Ayudando

 Hace muchos años, un grupo de mujeres convocadas por el padre Julian, sacerdote salesiano, conformaron las Damas Salesianas de Esquel, algunas de ellas docentes veían muchos jóvenes que no culminaban la escuela secundaria con todo lo que ello implicaba en su futuro, esto fue motivador para gestar una propuesta de una escuela de Gestión Social, que les permita a estos jóvenes acceder a la fiscalización de los estudios, pero también a encontrar caminos para ganarse el pan de cada día con el fruto de su trabajo, ofreciéndole la posibilidad de tener oficios.

Con mucho esfuerzo comenzaron con un oratorio y luego lentamente con la Escuela Cacique Inacayal, en un predio prestado por los Salesianos, soñando con el edificio propio, pero no con un sueño que se adormece, sino que se hace vida y amor. Destaco eso porque fue uno de los mayores bienes que les dieron a esos jóvenes, cariño, amor, dulzura de madres, sufriendo sus dolores. Un abrazo con amor profundo a jóvenes, que algunos no conocían. 

Muchos de estos chicos encontraron un sentido a su vida, algunos lograron salir de un mundo que los arrojaba a la nada misma, como a muchos jóvenes, pero a estos sin siquiera las herramientas básicas para poder salir adelante.

El esfuerzo de las Damas, de los padrinos nacionales e internacionales, el apoyo de parte de la comunidad de Esquel y del Estado han logrado llegar a realizar un gran sueño y este viernes 24 de septiembre inauguran oficialmente, el nuevo edificio.

El Caballero de Nuestra Señor ha publicado más de una vez sobre esta obra y ha pedido el apoyo de sus lectores, por eso se alegra de esta inauguración, pero sigue pidiendo que acompañemos la obra que busca el bien de los jóvenes.

Al Centro de Damas Salesianas "Mama Margarita", al cuerpo docente y a los mismos alumnos que han de disfrutar esta obra, les encomendamos a la Santísima Virgen, a San Juan Bosco y al Beato Ceferino y demás beatos salesianos de nuestra Patagonia y por supuesto a la misma Mama Margarita, que tanto ayudo a Don Bosco en su obra.