Genta y Sacheri, Verdaderos mártires de la Fe


  Sr. Director de la revista Cabildo D Ricardo Curutchet ¡Presente! 

Carísimo hermano en Cristo Rey: 

Nos dirigimos a usted con la confianza que nos dan los dos contactos mantenidos con la comunidad nacionalista católica y la revista Cabildo, su más digno exponente, en las personas de los queridísimos, aunque extintos profesores Jordán B. Genta y Carlos A. Sacheri. Nos guía la certeza de que seremos atendidos por Vd. con la caridad cristiana que ilumina cual antorcha sagrada, su cosmovisión escolástica, virtud ésta enseñada por Cristo y de la que fueron devotos fervorosos Santo Tomás y San Agustín. No pretenderemos referirnos a las circunstancias del fallecimiento de los profesores nombrados, sólo haremos mención de algunos detalles que los rodean. Enterados de la ferviente devoción que los extintos profesaban a Cristo Rey, de quien se decían infatigables soldados, nuestra comunidad ha esperado las festividades de Cristo Rey según el antiguo y nuevo “ordo missae” y ha permitido que los nombrados comulgaran del dulce Cuerpo de su Salvador para que pudieran reunirse con Él en la gloria, puesto que en este Valle de Lágrimas eran depositarios de la Santa Eucaristía. (,,,)Esperamos no haber abusado de su valioso tiempo y nos atrevemos a pedirle que interceda ante Dios, con el diálogo de los justos, por la salvación de nuestras almas. Nos despedimos ofreciendo a Dios Padre, por Cristo, con Cristo y en Cristo todo el honor y toda la gloria de nuestras acciones, por los siglos de los siglos. Amén. 

Fdo. Ejército de Liberación 22 de Agosto».


Estas son las palabras de aquellos que el 27 de octubre de 1974 acabaron con la vida del Profesor Jordán Bruno Genta, están claras las razones y lo que movieron a estos delincuentes y terroristas, recordemos que era una facción del Ejercito Revolucionario del Pueblo, a matar a Genta primero y a Sacheri después,

¿Cual es la causa? ¿Una diferencia política? ¿Un odio personal? ¿Cortar un levantamiento en armas?

Nada de eso, el Profesor Jordán Bruno Genta, luego de una profunda búsqueda intelectual y espiritual se había convertido, no a personas humanas, no a la ecología, no lo temporal, si no a Cristo y en Cristo hallo la Verdad que buscaba, habiendo encontrado el Tesoro no quiso guardarlo, si no que lo anuncio, lo enseño, lo pregono a viva voz, sufriendo por eso persecución y odio, como el Maestro el discípulo sufre, pero no se acobarda, su mirada sobrenatural de la vida, la trascendencia del ser humano no lo deja temer contra los que matan el cuerpo.

Y, aquí la principal causa por que es muerto, por ser infatigables soldados de Cristo Rey, no de la Hoz y el martillo, de Cristo Rey. Esta es la razón de su martirio, por que no hay otra forma de llamarlo. Genta y Sacheri son, junto a San Hector Valdiviezo verdaderos mártires. argentinos mártires por Cristo. Mueren por odio a la fe,  aquí no hay que cambiar cánones del Derecho Canónico, ni hacer nuevos juicios, contra el principio del derecho de la cosa juzgada, y condenar en ellos a hombres que están muy lejos de abrazar el odio a la fe y por el contrario su fe fue causa de sus ataques. Mueren por odio a Cristo, única causa del martirio cristiano.

La confesión de los asesinos demuestran con certeza el odio a Cristo y el seguro asesoramiento de la Iglesia clandestina, denunciada por ellos y hoy beatificada.

Dos Obispos negaron sistemáticamente que se hicieran procesos sobre sus vidas y que puedan ser elevados a los altares y presentados como modelos del Divino Módelo al pueblo de Dios. Las causas dadas, se asegura, fueron calcadas, la historia ya demostró que la negativa no era por temas válidos, por lo que se argumentaba. La negativa fue sin duda la simpatía de los mitrados por aquella Iglesia clandestina que no dudo en dar apoyo a quienes se levantaron en armas contra la Argentina, que sembraron el terror en esta tierra y que fueron la causa de sus muertes.

 Genta y Sacheri no "pidieron armas para los muchachos", iluminaron con su enseñanza a los héroes de la Patria, quienes sin odio y con el Rosario en mano dieron su vida por ella. Creo que es una palma de gloria más para ellos, que sendos Obispos hayan rechazados sus causas, por que son los que persiguen a los Obispos y sacerdotes fieles, los que cierran seminarios probos y fecundos, los que buscan la conversión a lo temporal, los que siguen pregonando la lucha de clases, que enfrentan -desde sus comodidades- a la sociedad, son los que rechazan el Orden Natural promoviendo que la ley positiva permita cualquier cosa, los que abrazan a todos, menos a los católicos verdaderos, que buscan el sincretismo religioso, en vez de anunciar al único Salvador.

No es nuestra pluma la más apropiada para homenajear a estos verdaderos mártires de Cristo, pero no podemos dejar de hacerlo. Imploramos que ellos intercedan por la Iglesia, por la Patria, por cada uno de nosotros para que no caigamos en el error, para que no abandonemos la lucha, aunque en ello nos vaya la vida.

Jordan Bruno Genta, Ora pro nobis!

Carlos Sacheri, Ora pro nobis!

Jordan Bruno Genta, Carlos Sacheri ¡Presente!

¡Viva Cristo Rey!


Lic. Marcelo Grecco

Director

El Caballero de Nuestra Señor

27-10-2020



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